SEGURIDAD EN LA ESCUELA:

Manejo seguro de las herramientas en los centros escolares.

 

En el entorno escolar podemos distinguir las herramientas manuales que pertenecen al personal de mantenimiento, jardinería y cocina de la institución y las que utiliza el alumnado en actividades relacionadas con su enseñanza (Conocimiento del medio, Educación artística, etc.), que se centran en los trabajos manuales, los de jardinería, cocina u otras tareas diversas.

El personal de la escuela que usa con frecuencia herramientas manuales debe tener en cuenta las medidas generales de seguridad expuestas en el apartado: "Se trata de.", poniendo especial atención en lo que respecta al almacenamiento y control de las herramientas. Mientras se está trabajando con ellas, debe procurarse no dejarlas en sitios donde los niños puedan cogerlas y tampoco depositarlas en lugares altos desde donde puedan resbalar o caer (estanterías, peldaños de escaleras, etc.). Después de usarlas hay que guardarlas inmediatamente en su lugar correspondiente (cajas, maletines, armarios o paneles en la pared) y debidamente protegidas. En las escuelas debería haber un lugar específico para guardar todas las herramientas, que estuviera cerrado con llave y al que el alumnado no pudiera acceder.

En lo que respecta al uso de estos utensilios por parte del alumnado, hay que tener en cuenta que, desde el punto de vista ergonómico, las herramientas manuales deben cumplir unos requisitos básicos para que sean eficaces y seguras: que sean proporcionadas a las dimensiones del usuario y también apropiadas a su fuerza. Si tenemos en cuenta que entre los alumnos de primaria existen grandes diferencias físicas (edades comprendidas entre los seis y los doce años), sería muy conveniente que los centros escolares dispusieran de distintos tamaños de herramientas, sobre todo de las de uso más corriente como son las tijeras, cuchillos, destornilladores o martillos, de modo que se pudieran adaptar mejor a las características de cada estudiante.

Para fomentar las medidas de seguridad en el manejo de las herramientas manuales entre los niños y las niñas también se deberán tener en cuenta las medidas generales planteadas en el apartado: "Se trata de." y las normas específicas de cada herramienta que presentamos a continuación.

 

Alicates

Están diseñadas para sujetar, doblar o cortar. Hay que utilizarlas exclusivamente para estas funciones. Nunca hay que emplearlas para aflojar tuercas o tornillos (para estos trabajos se usan las llaves o los destornilladores), puesto que se corre el peligro de que resbalen y se produzcan lesiones en las manos. Tampoco deben utilizarse para golpear objetos.

 

Cuchillos

Son herramientas de mano que sirven para cortar. Deben transportarse siempre protegidos en estuches o fundas y nunca llevarse en los bolsillos. La hoja debe carecer de desperfectos y tener la punta redondeada. Hay que utilizarlos de forma que el recorrido de corte se realice en dirección contraria del cuerpo y extremar las precauciones al cortar objetos en pedazos pequeños. No deben usarse como abrelatas o destornilladores.

 

Destornilladores

Su función es apretar o aflojar tornillos de fijación sobre materiales de madera, metálicos, de plástico, etc. Los destornilladores que tengan el mango roto, la hoja doblada y la punta rota o retorcida no deben usarse; estas condiciones favorecen que la hoja se salga de la ranura del tornillo y puedan producir lesiones en las manos. Hay que escoger un destornillador cuyo espesor, anchura y forma se ajuste perfectamente a la cabeza del tornillo: ni demasiado pequeño, ni demasiado grande; ni muy grueso, ni muy delgado. Un encaje defectuoso estropea tanto la ranura del tornillo como la punta del destornillador, lo cual dificulta su utilización y favorece que se produzcan accidentes. El destornillador hay que utilizarlo siempre haciendo el esfuerzo de forma vertical sobre el tornillo, de este modo se evita que pueda resbalar. La pieza sobre la que se tenga que trabajar hay que apoyarla sobre una superficie plana y firme y no debe sujetarse con las manos, sobre todo si es pequeña. La mano libre se situará fuera de la trayectoria del destornillador.

 

Llaves de boca fija

Son herramientas que sirven para ejercer fuerza de torsión al apretar o aflojar pernos, tuercas y tornillos que posean cabezas que se correspondan a las bocas de la herramienta. La mayoría de accidentes relacionados con estas herramientas, golpes y caídas se producen cuando se escapa la llave del punto de sujeción y el esfuerzo aplicado queda fuera de control. Es muy importante utilizar la llave de forma que esté completamente abrazada o encajada a la tuerca y formando ángulo recto con el eje de ella, para evitar que resbale. Hay que efectuar la torsión girando hacia la persona que la está utilizando, nunca empujando, y se tendrá especial cuidado en que los nudillos no golpeen contra ningún objeto.

 

Martillos y mazas

Son herramientas de mano diseñadas para golpear. Un accidente de especial gravedad asociado a esta herramienta es el que se produce cuando se desprende la cabeza del martillo al golpear. Una medida de seguridad básica es asegurarse, antes de usar el martillo, de que la cabeza y el mango del martillo están sólidamente encajados por medio de su correspondiente cuña de fijación y no utilizar los que refuercen está unión con cuerdas o alambres. Al golpear hay que sujetar el martillo por el extremo y hacerlo de modo que la cara de la cabeza quede paralela a la superficie que se golpea. De este modo, las acciones son más seguras y certeras.

 

Sierras

Son herramientas diseñadas para cortar superficies de diversos materiales. La hoja de las sierras es una cinta de acero afilada y dentada; el contacto accidental con ella puede producir graves cortes y heridas. Deben transportarse y guardarse siempre con fundas de protección. Antes de empezar a serrar, hay que fijar firmemente la pieza de trabajo para evitar que se mueva y para que no se produzcan gestos inesperados que induzcan a accidentes. No se debe serrar con demasiada fuerza porque la hoja dentada puede doblarse y partirse. Al empezar a serrar la herramienta debe estar ligeramente inclinada y los primeros cortes se harán tirando de ella hacia atrás, nunca empujando, para facilitar el inicio de la hendidura que actuará como guía de la sierra.

 

Tijeras

Están diseñadas para cortar materiales duros (hojas de metal, tallos, ramas, etc.) y blandos (cartón, papel, ropa, etc.). Las puntas de las dos hojas afiladas que componen esta herramienta deben ser redondas, en el caso de que las utilicen los niños. Hay que evitar utilizar tijeras que estén melladas porque dificultan la acción de cortar y favorecen los gestos inseguros. Tampoco se deben utilizar como destornilladores ni para golpear. Hay que realizar los cortes en dirección contraria al cuerpo y para optimizar el trabajo, si se es diestro, se debe cortar de forma que la parte cortada que no sirve quede a la derecha de las tijeras y a la inversa, si se es zurdo.

 

 

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Información obtenida del Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo.

 

Autor y Webmaster: Javier Pérez Soriano.

Profesor del I.E.S. Poetas Andaluces de Benalmádena (Málaga).

Técnico Superior de Prevención de Riesgos Laborales en las especialidades de: Seguridad en el Trabajo, Higiene Industrial, Ergonomía y Psicosociología Aplicada.

Formador de Formadores en Seguridad y Prevención de Riesgos Laborales.

Auditor de Sistemas de Gestión de Prevención de Riesgos laborales.