Sevilla - El 9% de las bajas de los docentes se produce por causas psíquicas.
La Consejería de Educación ha elaborado un exhaustivo análisis de las 122.000 bajas por enfermedad que se han producido a lo largo de cinco años –de 1999 a 2004– entre los 90.000 docentes andaluces del sector público de la enseñanza Primaria y Secundaria. Este trabajo se ha realizado como paso previo a la redacción de un plan de salud laboral para prevenir estas enfermedades y conseguir reducir el número de sustituciones al que se ve obligada a hacer frente la Administración autonómica.
El informe, el primero de estas características que se elabora en la comunidad autónoma, ha determinado que el 34 por ciento de las bajas se produce por afecciones respiratorias (gripes y problemas en las cuerdas vocales); el 26 por ciento por enfermedades ligadas a los huesos y articulaciones y el 9 por ciento es de tipo psiquiátrico y/o psicológico. El resto de dolencias –cardíacas, cáncer, etcétera– no llegan al 4 por ciento. Lo más significativo no es que el 9 por ciento de las bajas sean por dolencias psíquicas, sino que éstas posean una media de duración muy alta, en torno a los 70 días, frente a las diez jornadas que mantiene en casa a los docentes que padecen una afonía.
El máximo responsable de personal en la Consejería de Educación atribuye el elevado índice de bajas por depresión a los altos índices de estrés que sufren los profesores en la actualidad, en gran parte por su obligación de actuar en la mediación de conflictos que surgen en las aulas e incluso fuera de ellas.
"El informe ofrece una fotografía real del problema y no una aproximación porque no se ha hecho por encuesta, sino que se ha examinado caso a caso", informa Carlos Gómez Oliver, director general de Recursos Humanos de la Consejería de Educación. "No existe un trabajo de estas características en toda España", insiste. Una vez analizado el estado real del problema, expertos en la materia han redactado un plan de salud laboral para los trabajadores de las aulas, texto que próximamente será remitido a Consejo de Gobierno para su discusión.
El plan incluye medidas para prevenir y atajar estas dolencias. En el caso concreto de los docentes con afecciones en la garganta, además de darles formación para trabajar correctamente en el aula, se les facilitará un tratamiento logopédico. También se redactará un protocolo para que los docentes sepan los pasos a seguir cuando tengan un problema de este tipo. Otra de las medidas a adoptar será la instalación de megafonía inalámbrica en aquellos casos en los que sea necesaria.
En el supuesto de que los docentes se encuentren de baja por motivos psiquiátricos, el plan de salud laboral recoge, como medida de carácter experimental, la incorporación paulatina al aula de este profesorado. El profesional que se reincorpore a su trabajo tras haber sufrido una dolencia psicológica contará con el apoyo del profesor interino que le había sustituido durante su ausencia para que, en un primer momento, no tenga que estar todo el tiempo a solas con sus alumnos.
La puesta en marcha de este plan enlaza con la reiterada petición de la sección de enseñanza del sindicato UGT de Andalucía de que se elabore un catálogo de enfermedades profesionales de los trabajadores de la enseñanza y que éste se recoja en el estatuto de la función pública docente. En opinión de UGT, este catálogo, aún por redactar, debe incluir las alteraciones más habituales que sufren los docentes: los problemas de voz, sus psicopatologías laborales y sus lesiones músculo-esqueléticas
17/04/2006 12:59:00 - Diario de Jerez
